viernes, 15 de enero de 2010

Mucha (demasiada) economía sumergida

30.000 trabajadores engrosan la economía sumergida en Asturias (publicado en La Voz de Asturias)

En el enlace anterior podéis leer mis opiniones y las de Carlos Monasterio. Como siempre, la viñeta de El Roto, genial.

Roberto Fernández Llera, profesor de Economía Pública de la Universidad de Oviedo, señala que "es imposible estimar afinadamente a cuánto asciende el fraude fiscal y laboral en España. Lo que sí está claro es que España siempre encabezó y todavía encabeza estas estadísticas, sea cual sea el indicador que se utilice".

Sobre el efecto de la crisis en el repunte de estas prácticas Fernández Llera opina que "ante la disyuntiva de ir al paro o trabajar en la economía sumergida, mucha gente elige la segunda opción. Hasta aquí, es bastante humano y entendible, aunque no sea lícito desde el punto de vista de la legalidad. Lo que no es ni ético ni legal es que ciertas empresas aprovechen la coyuntura negativa para emplear a personas sin contrato laboral o con jornadas y sueldos infames". En este sentido añade que "lo que más me choca es el fraude que está habiendo en la facturación del IVA, cuya recaudación cayó más de un 30%, cifra muy superior a lo que se redujo el consumo nacional".

Este economista coincide con Carlos Monasterio en que la misma estructura de la economía de la región y el mayor peso de los asalariados en relación a otras comunidades autónomas hace que, probablemente, Asturias se encuentre "por debajo de la media". Para Roberto Fernández Llera, lo más inmediato para la lucha contra estas prácticas fraudulentas es lograr "un refuerzo claro de la inspección de trabajo y de la inspección fiscal. Ambas tienen que tener más medios para ganar en eficacia y agilidad a la hora de detectar fraudes, sancionarlos y recuperar los ingresos perdidos para el Sector Público en forma de cotizaciones sociales e impuestos".

Pero más importante que todo esto, desde su punto de vista, es "concienciar a la gente de que el fraude y la economía sumergida suponen un deterioro de nuestra calidad de vida y de nuestros recursos comunes. Por ejemplo, pidamos siempre el ticket en la farmacia, exijamos factura de todo y, por supuesto, denunciemos a las empresas que pretenden contratar a un trabajador de forma ilegal".

No hay comentarios: